Clunia. Vinos de altura

Este vino se diferencia porque el clima durante el período de maduración cuenta con una gran amplitud térmica, con días muy soleados y calurosos, pero con noches muy frescas. Esto otorga una especial concentración aromática de gran estructura y cuerpo y taninos muy maduros.

Su elegante bouquet, descubre la gran complejidad de aromas que presentan el vino sorprendiendo a la nariz la dualidad de intensidad y delicadeza de todos ellos. Su inmenso ramillete ofrece claras notas de fruta negra, confitura de mora y ciruela roja, que combinan a la perfección con la aportación de la crianza en forma de vainilla, destellos de hoja de tabaco, toffee, toques balsámicos y sorpendentes matices florales entrelazados con recuerdos de pimienta negra y cacao, aportando todo el conjunto de una original complejidad aromática, capaz de entusiasmar a la nariz más exigente.

Su paso por el paladar es fiel reflejo de lo experimentado en nariz. La intensidad de la fruta, unida a los dulces taninos hacen de él un vino agradable, elegante, suave, armónico y con persistente retrogusto que ayuda a mantener vivo el grato recuerdo de las sensaciones manifestadas.

Bodegas Blasco recomienda este vino para pates y quesos, caza menor, becada y perdiz, parrilladas, cochinillo y lechal. Descubr más sobre este vino de altura en nuestra bodega.